jueves, 27 de diciembre de 2007

Bares de chinos


La cosa está que arde queridos hijos de puta.
La muralla china se expande cual masa devora-lo-todo estilo peliculas americanas años 60.
Si antes eran los restaurantes chinos el único reducto de estos peculiares humanos trabajadores, andaos con ojo que al paso que vamos la única tortilla de patatas que vamos a poder degustar es la que te venden en Mercadona congelada.
Que digo yo que manda güevos que bar al que entres, bar que te sirven los chinos de marras. La tortilla ahora es toltilla y las gambas rebozadas son de un tiempo a esta parte gama reozada.
Tenía un profesor que decía que cien moscas no se pueden equivocar. Consecuencia: la mierda es buena.
Y además de buena barata. Cambio las tapas de artesanía por las congeladas de Makro siempre que me las vendan a 50 céntimos. ¡Viva los chinos y la madre que les parió! Nos han traído los precios de la Europa del Este al portal de casa.
Si encima trabajan, te atienden de puta madre y además nunca se equivocan al cobrar, bravo por ellos.
Y al que le joda que trabaje.
Pequesaurio

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